NO SON DETALLES MENORES ATACAR UN GOBIERNO DEMOCRATICO
Creo que es de bien nacido, cuando se analiza y se opina acerca de la realidad, explicitar desde qué lugar cada uno lo hace.
Si bien al leer mis reflexiones, es fácil advertir mi pertenencia al peronismo y mi apoyo al proyecto nacional iniciado en Mayo de 2003 por Néstor Kirchner y que hoy conduce Cristina Fernández de Kirchner. Siento que además, debo agregar que soy un sobreviviente de la generación de mis treinta mil hermanos desaparecidos. Que mi militancia de entonces estaba repartida entre la JTP de actores y la JP del barrio de Saavedra.
Actualmente trabajo en un negocio de atención al público y no tengo vinculación alguna con ningún funcionario, ni con algún área de gobierno en ninguno de sus niveles nacionales, provinciales ni municipales.
Desde este posicionamiento expreso mis opiniones, cada vez que me siento interpelado, por alguno de los escribas a sueldo del Cártel Clarín y sus satélites menores.
Porque cada vez que agravian a “mi” Presidenta, están agraviando e insultando al 54,11% que la votamos y a los que se han acercado desde el afecto o la convicción luego del 23 de octubre pasado.
Yo tengo por costumbre, responder cuando me siento agraviado, y como las palabras no me son esquivas, es que hago escuchar mi voz, gracias a la Ley de Medios de la democracia que supimos conseguir.
Pero no me siento representante de nadie, tan sólo de la indignación que me aflora cuando se insulta mi inteligencia, desde las pantallas, micrófonos o páginas que intentan retorcer hechos, tergiversar acontecimientos, mentir a sabiendas u ocultar lo que salta a la vista.
Por eso, cuando se utiliza el actual posicionamiento de Hugo Moyano, para atacar al gobierno y la Presidenta, con juegos de prestidigitación intelectual, con argumentos que desnudan las propias contradicciones o culpas ocultas del que escribe, porque sabe, siente o intuye que pasó una línea de la que no se vuelve.
Por eso, digo, trato de mostrar la miseria espiritual del que pretende confundir (nos) para hacerle el juego a los demiurgos destituyentes, que para defender los negocios conseguidos siendo socios de los genocidas, le pagan a estos mercenarios del “periodismo de inteligentzia”.
Cito algunos párrafos. Primero: “…O Moyano no era un genuino defensor de los intereses de los trabajadores, sino apenas un burócrata desesperado por la plata y el poder, y entonces en todo este tiempo los forjadores del relato K mintieron o les mintieron o se mintieron sobre este punto (y si mintieron o se mintieron o les mintieron sobre este punto ¿sobre qué otros mienten o se mienten?...)”
Los que han leído mis últimas reflexiones, saben cual es mi posición respecto del derrotero del secretario general de la CGT, Sobre eso no agregaré nada.
Acerca de esa parrafada digo: lo que nos quiere inducir a pensar este defensor del “más débil (Clarín)” es que el gobierno y en particular la Presidenta nos miente, mentía o mintió, cuando Moyano era aliado del gobierno o ahora que se alejó.
Lo que pone de manifiesto este párrafo es una profunda ignorancia respecto a que los trabajadores son los que evalúan como cada dirigente defiende sus intereses. Y que si Hugo Moyano, por cuestiones internas del sindicalismo o de su reelección al frente de la CGT, cambió su postura frente al gobierno, es un problema de Moyano, y no de Cristina Fernández de Kirchner. Porque sea quien sea que conduzca la CGT, ella representa a los 40 millones de argentinos.
Segundo párrafo del mismo razonamiento: “…Que haya opositores al gobierno para los cuales Moyano haya pasado de demonio a santo…refleja que el indómito Moyano no sólo desconcierta a los K…”
Esos opositores de los que habla, son sus patrones, que llevaron a Moyano de turismo por todas las dependencias del Cártel Clarín, para construirse un aliado en su “guerra” contra el gobierno nacional.
Un tercer párrafo, sirve para comprender, como este escriba del poder corporativo, utiliza la figura de Moyano para desprestigiar a la Presidenta: “…Moyano es un líder sindical admirable si está con el gobierno y un traidor si está mal…” “…Y no sólo Moyano, todo funciona de esta manera. Nadie es “per se” nada: cada uno es quien la jefa dice que es…”
Este último razonamiento me suena a que es lo que TNembaum siente en su fuero interno respecto de su jefe Magneto: que el no es nada más que lo que Magneto quiere que sea.
A veces, cuando uno escribe, termina resignificando de alguna manera la propia problemática personal que lo aqueja cuando busca poner palabras a una idea determinada.
Con la misma impune “ingenuidad” yo podría argumentar: TNembaum no era un genuino defensor de los derechos humanos cuando escribió aquel libro sobre los niños y niñas apropiados, cuando colaboraba con Abuelas de Plaza de Mayo, sino alguien arribista que estaba esperando su oportunidad para llegar donde está ahora, trabajando con quienes adoptaron ilegalmente a dos criaturas, de las cuales todavía se sospecha que puedan ser hijos de desaparecidos. ¿O es que Estela de Carloto ha cambiado tanto, y es verdad como han dicho Lanata, Nelson Castro, Leuco, y otros de la misma catadura, que la presidenta de Abuelas y los organismos de Derechos Humanos han sido comprados por el gobierno K?
Hay algo que tal vez no pueda entender alguna gente, es que cuando uno está dentro de un proyecto nacional y democrático, y tiene responsabilidades de conducción, y hay una persona que conduce ese proyecto, porque es elegida por el voto mayoritario para, precisamente conducir ese proyecto en el sentido en que ha sido votada en elecciones abrumadoras. Aquellos dirigentes deben entender, si son representantes de un sector, que los intereses de ese sector no pueden ser más importantes que los del conjunto de la sociedad. Y que una Presidenta defiende los intereses de los 40 millones de argentinos, no es lobbysta de un sector, aunque no sea neutral y defienda los intereses de los más vulnerables.
Daniel Mojica
Columnista de Radio Gráfica
No hay comentarios:
Publicar un comentario